Reducir la velocidad salva vidas

Cada semana niñ@s de nuestro país sufren lesiones graves o fatales en siniestros viales. La problemática es global pero la solución no. La misma acción no generará los mismos resultados en cada ciudad o deberá ser aplicada teniendo en cuenta costumbres, rutinas, cantidad de población y densidad del tránsito –entre otras cosas- de cada zona.

Desde Mamás y Niños Seguros creemos que el cambio es cultural y en eso mucho pesan las conductas individuales, pero nada tendrá más fuerza que las acciones colectivas para mejorar la conciencia sobre la seguridad vial: alcohol, velocidad, distracciones, producen la mayor cantidad de siniestros y son factores evitables.

Las calles limitadas a 30 km/h (20 mph) salvan vidas y protegen a todos los que las transitan, especialmente a los más vulnerables, como peatones, ciclistas, personas mayores y personas con discapacidad.

A menor velocidad:

??Es más probable que un conductor mantenga el control del vehículo.
??Es más probable que un conductor se anticipe a peligros inminentes.
??La distancia recorrida en un momento dado es más corta.
??La distancia de frenado para un vehículo, después que el conductor reacciona y frena, será más corta.

Un peatón adulto tiene aproximadamente un 20% de riesgo de morir si es golpeado por un coche a 60 km/h., si baja la velocidad aumentan las posibilidades de sobrevida, pero en el caso de los niñ@s, por su contextura física, la posibilidad de salir ilesos al ser arrollados por un vehículo es mucho más baja

¿Querés que tus hijos crezcan en entornos seguros y saludables?

Unite a la campaña #CallesParaLaVida para pedir que los límites de velocidad de 30 km/h sean la norma para las ciudades y pueblos de todo el mundo.

• La sexta Semana Mundial de la Seguridad Vial de las Naciones Unidas se celebra del 17 al 23 de mayo de 2021, exige calles de 30 km/h (20 mph) como estándar.
  
  ¿Por qué?
  La OMS afirma que:
• Las calles de baja velocidad salvan vidas y son el corazón de cualquier comunidad.
• Los límites de velocidad de 30 km/h donde las personas y el tránsito se mezclan hacen que las calles sean seguras, transitables y ayudan al cambio climático.
  
  
• ¿Cómo me sumo?
  
  Compartí y firmá el petitorio para que para que los legisladores actúen por las calles de baja velocidad en todo el mundo, limitando las velocidades a 30 km/h, donde la gente camina, vive y nuestros hijos, crecen, juegan y se desarrollan.

Por Ana Belén Ehuletche del equipo de Mamás y Niños Seguros - Seguinos en redes @mamaseguras